Nueva York. – Cincuenta y siete personas que se encontraban en Estados Unidos de manera ilegal fueron detenidas la semana pasada durante una redada en una planta de bocadillos en Cato, al norte del estado de Nueva York, informaron las autoridades federales.
El fiscal interino John Sarcone detalló que cinco de los detenidos enfrentan cargos penales por reingreso ilegal al país, mientras que los otros 52 fueron puestos bajo custodia a la espera de procesos de deportación. Señaló además que la investigación sobre la empresa Nutrition Bar Confectioners continúa, y advirtió que habrá “más acciones a gran escala” contra empleadores que contraten a indocumentados.
El grupo defensor Rural and Migrant Ministry aseguró que la mayoría de los trabajadores detenidos provenían de Guatemala. El mismo día, en un operativo separado en Georgia, autoridades de inmigración arrestaron a 475 personas en una planta vinculada a la fabricante de automóviles Hyundai.
Reacciones encontradas
Los dueños de la planta en Nueva York alegaron que todos sus empleados contaban con documentación legal y que desconocen las razones de la redada. Mientras tanto, la gobernadora Kathy Hochul criticó la acción, señalando que padres de familia fueron detenidos y “al menos una docena de niños corrió el riesgo de regresar de la escuela a una casa vacía”.
Sarcone aseguró que servicios sociales intervinieron y que ningún menor quedó desamparado tras el operativo. Fotos y videos de la redada mostraron a agentes federales de inmigración y patrulla fronteriza trasladando a los trabajadores en camionetas oficiales.
