Santo Domingo. – El ministro de Agricultura, Limber Cruz, informó que las zonas arroceras del nordeste del país se encuentran inundadas como consecuencia de las intensas lluvias provocadas por el paso de la tormenta Melissa, que ha afectado gran parte del territorio nacional.
Cruz aseguró que el Gobierno acudirá en auxilio de los sectores afectados, y que el Ministerio de Agricultura cuenta con un plan de acción para enfrentar la situación. Explicó que este martes fueron convocados para declarar el estado de emergencia, lo que permitirá agilizar la ejecución de los recursos destinados a las labores de recuperación.
El funcionario indicó que ya se han identificado los daños preliminares y que el Ministerio está listo para iniciar las licitaciones y los procesos correspondientes, conforme al sistema de compras y contrataciones públicas.
“El problema se resuelve con recursos, y esta semana ofreceremos los detalles de cómo vamos a empezar a resolverlos. No nos hemos detenido; seguimos trabajando en la siembra y en la reparación de caminos con nuestros propios equipos”, señaló Cruz.
Agregó que la adquisición de nuevas semillas y equipos requerirá nuevos procesos de licitación, y que la ayuda a los productores se canalizará mediante mecanismos de compensación de pérdidas, dado que los recursos disponibles son limitados.
Durante La Semanal, el ministro informó que el sector agropecuario registra pérdidas preliminares de unos RD$1,350 millones a causa de las inundaciones provocadas por Melissa, que ya se ha convertido en huracán a su paso por Jamaica.
De acuerdo con los reportes iniciales, 734 productores han resultado afectados, con 36,700 tareas de cultivo dañadas parcialmente, aunque las cifras podrían aumentar conforme avanzan las evaluaciones.
Entre las provincias más afectadas mencionó San Juan, Elías Piña, Barahona, Independencia, Pedernales, Azua, Baní, San Cristóbal, Monte Plata y San José de Ocoa, estas dos últimas con daños significativos.
El ministro también recordó que un tornado ocurrido días antes del huracán impactó zonas productivas en Hermanas Mirabal, La Vega, Moca, Monseñor Nouel y San José de Ocoa, donde aún existen comunidades de difícil acceso.
