Santiago, RD. — Entre lágrimas y con profundo dolor, la madre de la adolescente de 13 años que murió de un disparo realizado por su primo, también menor de edad, exigió justicia y pidió a las autoridades identificar y arrestar al propietario del arma con la que su hija perdió la vida.
El trágico hecho ocurrió el pasado viernes en el sector La Islita, comunidad La Herradura, al suroeste de Santiago. De acuerdo con las versiones preliminares, el adolescente manipulaba un arma de fuego que pertenecía a un adulto cuya identidad aún no ha sido confirmada por las autoridades.
La víctima, Grismailin Paulino, falleció tras recibir un disparo en la garganta. Sus restos fueron sepultados este jueves en el cementerio de la comunidad, en medio de escenas de dolor y consternación. El primo responsable del disparo, también de 13 años, se encuentra bajo custodia del Ministerio Público.
Clamor de la madre
Criselis Paulino, madre de la menor fallecida, expresó su angustia e indignación, señalando que no descansará hasta que el responsable del arma sea procesado.
“Mi hija se me fue de la manera más injusta. Solo quiero que pague quien tenga que pagar, porque fue un arma de un adulto la que le quitó la vida”, dijo entre lágrimas.
Sostuvo que su hija era una niña dedicada a los caminos de la iglesia, obediente y respetuosa.
“Ella iba a la iglesia, danzaba y evangelizaba. Era una niña buena. Yo solo quiero justicia. Si él no quería hacerle daño, ¿por qué le disparó en el cuello y la mató?”, expresó.
La madre narró que había hablado con su hija dos horas antes de la tragedia.
“Me dijo: ‘Mami, estoy bien y no voy a salir’. También me habló de sus notas. Yo nunca pensé que esa sería la última vez que la escucharía”, recordó entre sollozos.
“No quería hacerlo”, dijo el primo
Al llegar a la residencia tras el hecho, Criselis encontró al adolescente en shock.
“Me dijo: ‘Tía, yo no lo quería así… Ya la maté, tía’”, relató la madre, quien asegura no encontraba explicación a lo sucedido.
Vecinos creían que el arma era de juguete
Residentes del sector afirmaron que días antes ya habían visto al menor manipulando el arma, pero no intervinieron porque muchos pensaron que se trataba de una pistola de juguete.
Las autoridades investigan la procedencia del arma y buscan identificar a su propietario.




