La joven Ammy Hiraldo, de 21 años, acusada de quitarle la vida a Yennely Andreina Duarte Hilario, de 18, el pasado 26 de marzo de 2024 en Quita Sueño, Cotuí, admitió durante el juicio de fondo que cometió el hecho, alegando que actuó “con mucho miedo” debido a supuestas amenazas de la víctima.
Durante su testimonio el pasado martes, Hiraldo declaró ante el tribunal que Duarte Hilario la habría amenazado con divulgar ante miembros de la iglesia donde se congregaba, incluyendo su pastor, unas supuestas fotografías que evidenciarían una relación entre ambas.
“Yo lo hice con mucho miedo, porque ella me amenazaba diciendo que iba a ir a la iglesia donde yo me congregaba… que iba a enseñar fotos”, expresó la acusada.
La madre de la víctima, Yenny Hilario, rechazó de inmediato la justificación de Hiraldo, asegurando que su hija fue asesinada brutalmente.
“Mi mayor adoración no se merecía esa muerte así, Ammy. Mi hija no merecía esa muerte así”, dijo entre llanto. Añadió que pide a Dios fortaleza y que “bendiga” a la acusada, pero insistió en que se realice “un juicio justo”.
El padre, Wilson Duarte, visiblemente afectado, señaló directamente a Ammy Hiraldo como la responsable de la muerte de su hija, y aseguró que no la conocía antes del crimen.
La última audiencia del proceso fue fijada para el lunes 1 de diciembre, fecha en la que se conocerá la condena. La familia pide una sentencia de 30 años de prisión.




