El oncólogo pediatra Alberto Olaya aseguró que la detección temprana de la leucemia linfoblástica aguda (LLA) y la incorporación de fármacos biotecnológicos basados en inmunoterapia hacen más eficiente el tratamiento de este tipo de cáncer infantil, al aprovechar la capacidad del propio sistema inmunológico del paciente para redirigirlo contra la enfermedad.
“La detección temprana de la LLA es el primer paso; entre más temprano es el diagnóstico, la intervención de los tratamientos es más eficiente”, afirmó en entrevista con EFE durante la Cumbre de Excelencia Médica Amgen (CEMA 2025), celebrada del 8 al 10 de agosto en el Caribe mexicano.
Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la LLA es una de las principales causas de muerte en niños y adolescentes en Latinoamérica y el Caribe. En México, se reportan alrededor de 5.000 nuevos casos de leucemia cada año en menores de 19 años, de los cuales tres de cada cuatro corresponden a este subtipo.
Olaya explicó que el sistema inmune “es un eterno vigilante que trata de evitar que se produzcan células malignas en el cuerpo”, y que las terapias inmunológicas buscan fortalecer esa función natural para erradicar enfermedades como la LLA.
Este cáncer de la sangre es más frecuente en niños de entre dos y cinco años, aunque también presenta mayor incidencia en personas mayores de 50.
El especialista destacó que, hasta hace pocos años, el tratamiento se basaba en quimioterapias altamente citotóxicas, que dañaban directamente el material genético de las células. Sin embargo, el uso de medicamentos biotecnológicos permite optimizar la respuesta inmune “de manera más específica y menos tóxica”.
“Combinar estrategias como la quimioterapia, inmunoterapia, radioterapia y la cirugía hace que los tratamientos sean más eficientes y personalizados”, concluyó.
La LLA se origina en las células inmaduras de la médula ósea y afecta la producción de glóbulos blancos normales. Entre sus síntomas se encuentran palidez, cansancio, anemia y aparición de moretones.