Moscu
Rusia se retirará de la Estación Espacial Internacional después de 2024 y se centrará en la construcción de su propia base orbital, anunció el martes el nuevo jefe de la agencia espacial del país, en medio de las fuertes tensiones entre Moscú y Occidente por la guerra en Ucrania.
El anuncio, aunque no es inesperado, arroja dudas sobre el futuro de la estación espacial, ya que los expertos afirman que sería extremadamente difícil —quizá una “pesadilla”, según una estimación— mantenerla en funcionamiento sin los rusos. La NASA y sus socios esperaban seguir operando hasta 2030.
“La decisión de abandonar la estación después de 2024 está tomada”, dijo Yuri Borisov, quien fue designado este mes para dirigir la agencia espacial rusa, Roscosmos. “Creo que para ese momento empezaremos a armar una estación orbital rusa”, agregó durante una reunión con el presidente Vladimir Putin.
Durante mucho tiempo, la estación espacial ha sido un símbolo de cooperación internacional tras la Guerra Fría, pero ahora es una de las pocas áreas de cooperación entre Estados Unidos y Rusia.
Funcionarios de la NASA dijeron que aún no habían sido informados directamente por sus socios rusos sobre el asunto. El administrador de la NASA, Bill Nelson, emitió un comunicado en el que afirmaba que la agencia estaba “comprometida con el funcionamiento seguro” de la estación espacial hasta 2030 y que sigue “construyendo capacidades futuras para garantizar nuestra presencia en la órbita terrestre baja” .
El vocero del Departamento de Estado de Estados Unidos, Ned Price, dijo que el anuncio era “un evento desafortunado” dada la “valiosa colaboración profesional que nuestras agencias espaciales han tenido durante años”.
La declaración de Borisov concluyó comentarios previos de funcionarios rusos sobre la intención de Moscú de abandonar la EEI después de 2024, fecha en la que finalizan los acuerdos actuales internacionales para su funcionamiento.
Las autoridades rusas llevan tiempo hablando de su deseo de lanzar su propia estación espacial y se han quejado de que el desgaste de la envejecida EEI pone en riesgo la seguridad y podría dificultar la prolongación de su vida útil.
El anuncio ruso seguramente dará pie a especulaciones de que forma parte de las maniobras de Moscú para obtener un alivio de las sanciones occidentales por el conflicto de Ucrania. El predecesor de Borisov, Dmitry Rogozin, dijo el mes pasado que Moscú podría participar en las negociaciones sobre una posible ampliación de las operaciones de la estación sólo si Estados Unidos levanta sus sanciones contra la industria espacial rusa.